¿Qué es un edema óseo?
El edema óseo es lesión que cursa con una inflamación en la zona medular del hueso esponjoso. Esta inflamación se debe generalmente a un traumatismo, sobrecarga física, caída, microtraumatismos de repetición, etc.
El hueso contiene vasos sanguíneos que ante el traumatismo responden provocando el sangrado interno del hueso. Al producirse esto, la zona lesionada recibe células sanguíneas acumulándose líquido inflamatorio, originándose el edema. Cuando dicho líquido inflamatorio no se reabsorbe y perdura en el tiempo, normalmente se produce el edema óseo. Generalmente, la reabsorción de dicho acúmulo de líquido tarde entre 10 y 12 meses en reabsorberse totalmente.
Zonas más comunes del edema óseo y síntomas principales
Las zonas más comunes en donde aparece son cadera, rodilla, tobillo (astrágalo y calcáneo), tibia, hombro y muñeca. El edema puede estar causado, como adelantamos antes, por traumatismos o microtraumatismos o sobrecargas óseas, contusiones óseas, fracturas, lesiones del cartílago o subcondrales, edema óseo idiopático, osteoartritis o infecciones.
El síntoma principal es el dolor, localizado en la zona lesionada. Disminuye con el reposo y aumenta con la actividad. Dicho dolor puede ir acompañado en ocasiones, de un derrame articular y edema de partes blandas. Puede llegar a manifestarse como dolor en reposo y en reposo nocturno.
El diagnostico del edema óseo solo es posible mediante resonancia magnética (RMN), en la radiología convencional no se aprecia el edema. En la resonancia magnética si se puede delimitar la zona, tamaño, extensión y realizar una valoración de su evolución.
La fisioterapia es una buena solución
El tratamiento más efectivo es el reposo. Es beneficioso trabajar la musculatura y movilizar las articulaciones adyacentes, para evitar la aparición de atrofia y rigideces. La magnetoterapia favorece la reabsorción del edema, disminuye la inflamación y alivia el dolor.
Así como complementar con un tratamiento de fisioterapia el cual incluye la magnetoterapia, masoterapia suave, movilizaciones, crioterapia, ejercicios dirigidos al fortalecimiento muscular sin impacto, presoterapia y baños de contraste. Todas estas medidas van encaminadas a la reabsorción del edema óseo y evitar complicaciones que puedan aparecer posteriormente por la cronificación del edema óseo.
Nuestra clínica y centro de fisioterapia en Dos Hermanas puede ayudarte si tienes un edema óseo y en definitiva, a que puedas tener una fase de recuperación mucho más eficiente y eficaz.